El Personal Indirecto y el Valor Añadido.
Es un tema sobre el que los directivos deben reflexionar si ven disminuir la participación de mercado o la cifra de negocios de la empresa en que trabajan. El valor añadido –y por consiguiente los beneficios- de una empresa depende sobre todo de la profesionalidad de su personal indirecto. El control individual y la motivación del mismo son muy difíciles.
Valor añadido
La empresa utiliza varios tipos de
recursos. Los clientes pagan cierta cantidad de unidades monetarias para
obtener sus productos o servicios. El valor de estas unidades monetarias debe
ser superior al costo de los recursos empleados. A eso se le llama valor
añadido y de él depende el beneficio. Uno de los recursos que la empresa
utiliza es el personal indirecto.
Inmediatamente surgen la
siguientes preguntas:
¿Para qué se necesita el personal indirecto?. Si, ante una
disminución de la cifra de negocios,
tenemos que reducir el número de nuestros colaboradores, ¿podremos
explicar las consecuencias que tendrá tal reducción?. ¿Podemos medir la eficiencia y la eficacia del personal
indirecto?. ¿Cómo mejorarlas?. ¿Cómo motivarlo?.
Valor añadido por el personal indirecto
El personal indirecto es el que debe dar valor al
producto o servicio que vendemos. Son los que especifican lo que quiere el
mercado, desarrollan e introducen las innovaciones, tienen la responsabilidad
de optimizar los procesos, se preocupan de reducir a un mínimo los recursos
financieros, compran los mejores materiales al mejor precio, cuidan del
personal como el activo más valioso de la empresa, aseguran la calidad que
espera el cliente, colocan a tiempo el producto en el mercado al precio más
alto posible, lo dan a conocer a los clientes recogiendo su información de
retorno y mantienen o reparan el producto si fuera necesario, siempre a plena
satisfacción del cliente. El valor añadido –y por consiguiente los beneficios-
de una empresa depende mucho de la profesionalidad de su personal indirecto, es
decir el grado en que es competente y está motivado para el logro. Aptitud y
actitud.
Costo del personal indirecto
Cada vez que se habla de
competitividad parece que nos estemos refiriendo al coste de la mano de obra
directa en la industria. Si tenemos en cuenta que, en una industria manufacturera,
ésta representa alrededor del 5% del precio de venta, el material viene
a ser el 40% y el personal indirecto alrededor del 30%,
parece que habrá que pensar también la productividad de éste. Como la industria
solo es el 13% del PIB español, cuando hablamos de “el elevado costo de la mano
de obra ” nos referimos a menos del 0,7% de los costos totales. Cada sector de
actividad presentará unas proporciones diferentes pero probablemente el costo
del personal indirecto será proporcionalmente incluso superior que en la
industria.
Medición
Viendo la enorme importancia
del personal indirecto, ¿cómo podemos medir su valor añadido?.
Es posible medir el valor añadido del personal indirecto
en conjunto pero no el valor que añade cada uno.
El único indicador cuantitativo es nuestra participación
de mercado en unidades monetarias a valor constante. Si nuestra participación
se mantiene o aumenta es porque el producto que fabricamos, el servicio que
suministramos, ha dado a nuestros clientes HASTA EL DIA DE HOY la satisfacción
esperada. El problema es que no todas las empresas (sobre todo PYMES) pueden
conocer cual es su participación de mercado.
Si empezamos a perder participación de mercado, es porque
nosotros y nuestros colaboradores no estamos añadiendo suficiente valor.
Recuperar o ganar participación es una labor larga, difícil cara y arriesgada.
Si lo que disminuye es la cifra de
negocios y la participación se mantiene constante debemos crear las condiciones
para aumentar el valor añadido y ganar participación o, durante un cierto
periodo, reducir el personal sabiendo que corremos un gran riesgo ya que al
propio tiempo perdemos know-how.
Este indicador no
nos dice si tenemos o no el personal indirecto necesario y suficiente ni el
valor que añade cada uno.
Según Parkinson (La Ley de Parkinson – C.Northcote
Parkinson – Ariel) el personal indirecto tiende a crearse trabajo mutuamente,
sin provecho para la empresa y los clientes. Veamos ejemplos: reuniones, correo
electrónico, informes, viajes, controles, formación que no se utiliza...Podemos
tener personal exhausto que no genere valor. Hemos de evitar a toda costa
crearnos trabajo unos a otros, sin provecho para los clientes y por tanto
para la empresa
Reuniones
Reuniones con mala comunicación,
inútiles, inconcretas, para evadir responsabilidades, mal preparadas, sin
agenda, sin objetivos, ineficientes (una reunión sólo es eficiente si emplea
menos recursos que los contactos bilaterales) sin conclusiones y planes de
trabajo, etc. no añaden valor sino que lo absorben. Un síntoma es ver que hay
“participantes” en la reunión trabajando con su portátil. Y hoy día en muchas
empresas “fastidia” ir a una reunión. Sería bueno saber por qué.
Correo electrónico e informes
Nunca en toda la historia de la humanidad ha habido
tantas posibilidades de comunicación, tan eficientes y tan rápidas como las que
existen en el siglo XXI. Pero eso no significa que se usen correctamente.
Tomemos como ejemplo el correo electrónico y la frase
estereotipada: “me he encontrado 300 mails; ¡así no se puede trabajar!.
Probablemente, si has encontrado 300 mails la culpa es tuya y de la Dirección
de la empresa que o no sabéis o no os habéis ocupado de explicar cómo debe
funcionar el correo electrónico, herramienta útil donde las haya. Excepto para
seres privilegiados, es imposible dominar una competencia sin que alguien te
enseñe.
El caso de los informes es una derivación del anterior,
como el mensaje que incluye un informe que nadie lee. El 77% de los directivos
españoles dedica el 30% de su tiempo a reportar información (“Cuando dirigir no
es sólo hacer informes”. Expansion_com.mht. 14.2.2011).
Viajes
Otro tema a tener en cuenta son los excesivos viajes
–muchas veces para reuniones como las descritas anteriormente- que en muchos
casos se podrían sustituir por audio o videoconferencias.
Formación
Es muy corriente que la
empresa emplee recursos en dar formación a su personal y que éste no la utilice
y –quizás- ni la comprenda.
También resulta
preocupante y una señal de alarma que el personal no solicite formación en
temas de interés para su puesto de trabajo.
Controles ineficaces.
En algunos temas se intenta poner en marcha controles que
no sólo no añaden valor sino que son una pura pérdida de tiempo y una fuente de
desmotivación.
Hay que formular unas preguntas:
¿Cómo podemos intuir si el personal indirecto que
colabora con nosotros está contribuyendo a añadir el valor que la empresa
necesita?.
- Por la observación de los resultados de la
participación de mercado y los temas de la Ley de Parkinson.
- Pidiendo opinión al personal de otros departamentos y a
nuestros clientes, sabiendo que puede ser que unos y otros falten a la verdad.
- Con la comunicación frecuente Jefe-Colaborador para
verificar la profesionalidad de éste.
Motivación
Es muy adecuado que una parte del
salario del personal indirecto sea en forma variable (“bonus”) ligado a
objetivos predeterminados, siendo la cifra de negocios y el beneficio los más
importantes. Como motivación en el día a día de poco sirve, entre otras razones
porque muchos se dan cuenta que alcanzar o no ciertos resultados no estaba a su
alcance. Pero son un modo de que la gente obtenga mejores salarios en las
mejores empresas. El empresario viene a decir: “una parte de lo que el negocio
ha mejorado lo reparto con vosotros”. Y eso será cierto. Hay que explicarlo así
y no “venderlo” como motivación.
Por otra parte, no es necesario motivar a los buenos
profesionales; se motivan por sí solos y conocen su responsabilidad. En cambio,
hay que evitar desmotivarlos y para desmotivarlos la manera más eficaz es
quitándoles algo que consideren suyo (una plaza de parking, una oficina
individual, etc).
NOTA.
Una cuestión aparece, ¿porqué los fumadores –desde la
publicación de las últimas leyes- parece que tengan derecho a trabajar una o
dos hora menos que los no fumadores?. Si para compensarlo alargan su jornada,
¿se quejarán después de dificultad para la conciliación de horarios?.